¡Son las manitos llenas de color las que cambian tu vida!

lunes, 7 de noviembre de 2011

Figuras decorativas para el árbol de navidad ( 2º parte )

Estoy tan feliz, hoy los niños me esperaban con muchísimas ganas de hacer manualidades: ¡Qué agradable es saber que querían estar conmigo! ¡Que linda sonrisa al verme entrar! Lo único que realmente lamento es no poder llegar a todos en el hospital. El tiempo se me hace muy corto y mis manos son sólo dos. Cómo quisiera poder sensibilizar  a un grupo de voluntarios y formar  un equipo  con buena voluntad  para hacer llegar esta terápia a todos los niños del hospital. Bueno, ni modo... por lo pronto, lo importante es que los pocos que atiendo les doy una atención íntegra y de calidad, pasamos un rato divirtiéndonos, riéndonos y aprendiendo mutuamente...

Hoy continuamos con las figuras decorativas para el árbol de navidad. Realizamos la galleta de jengibre y el hombrecito de nieve. Los niños han hecho verdaderas maravillas! Aquí les presento como fue la actividad...

La Galleta de Jengibre



Amo las galletas de jengibre y después de verla personificada en la película de Shrek,  compruebo que se ha convertido en el personaje favorito de niños y adultos. Este video es para matarse de las risas...

La galleta de jengibre es un típico navideño, tan solo verla, uno  puede sentir su aroma, ese aroma a navidad con las esencias que al hornearla impregnan todo el ambiente...ummm... se  me hace agua la boca.

Jésica haciendo su galleta de jengibre con porcelana fría


"Galletas de Jengibre"

Cantidad personas: 4


Ingredientes:
  • 100 gr margarina
  • 2 1/2 taza(s) harina
  • 1/4 taza(s) azúcar
  • 1 cucharada(s) miel derretida
  • 1/4 cucharadita(s) jengibre
  • 1 cucharadita(s) bicarbonato
  • 1 yema (s)
  • 1/2 cucharadita(s) canela
  • 1/8 cucharadita(s) nuez moscada
  • clavos de olor
  • limón(es) (su ralladura)
Instrucciones
    Unir todos los ingredientes, dejar reposar en el refrigerador por 30 minutos. Uslerear y cortar con moldes. Hornear 8 minutos a fuego fuerte. Una vez frías, adornar con glasé y mostacillas de colores.



Colocándole el decorado...

La galleta esta listá...¡Para comérsela!

La galleta de jengibre de Deadayane

Luego de darle forma a la galleta, le colocas crema por todo el borde, una  sonrisa pícara...

ojos y botones de dulces. ¡Qué deliciosa quedó!


La Galleta de Jengibre.
Cuento
Érase una vez una viejita y un viejito que vivian solos en una antigua casita  junto al camino.
   Un día, la viejita decidió, como sorpresa, cocinar algo especial.
 
   - Voy a hacer un hombrecito de jengibre - dijo.
   Entonces la viejita hizo una galleta de jengibre en forma de muñeco y la puso al horno. Pero pronto oyó una suave vocecita que gritaba:
   - ¡Déjenme salir! ¡Déjenme salir! -
 
   La viejita se acercó al horno para escuchar mejor. Luego abrió la puerta del horno.
   ¡El hombrecito de jengibre salió de un salto! Atravesó la cocina a saltitos y corrió directo para afuera.
   
   El hombrecito ya estaba corriendo por el camino antes que los viejitos alcanzaran a salir de la casa. Ellos no podían correr tan rápido como él.
   - ¡Alto! Queremos comerte. ¡Alto hombrecito de jengibre! - gritaron sofocados.
   Pero el hombrecito de jengibre no hizo más que cantar;
   - ¡Corran, corran todo lo que puedan! ¡A mí no me podrán agarrar! ¡Soy el hombrecito de jengibre! -
   Pronto el hombrecito de jengibre se encontró con una vaca.
   -¡Alto hombrecito! - mugió la vaca. - Te ves muy sabroso. -
   Pero el hombrecito de jengibre simplemente se puso a correr más rápido, cantando:
   - ¡Corran, corran todo lo que puedan! ¡A mó no me podrán agarrar! ¡Soy el hombrecito de jengibre!
   Corría y corría la vaca, pero no pudo alcanzar al hombrecito de jengibre.
   Más allá se encontró con un caballo. - ¡Alto hombrecito! - relinchó el caballo.
   - Pareces ser muy sabroso, y tengo hambre. -
   Pero el hombrecito de jengibre simplemente se puso a correr más rápido.
   Galopaba y galopaba el caballo, lo más rápido que podía, pero no pudo alcanzarlo.
   - Me escapé de unos viejos y de una vaca. - gritaba el hombrecito de jengibre, cantando a medida que corría:
   - ¡Corran, corran todo lo que puedan! ¡A mí no me podrán agarrar! ¡Soy el hombrecito de jengibre! -.
   El hombrecito de jengibre siguió corriendo, cada vez más lejos y cada vez más rápido. Se sentía feliz y orgulloso de su rapidez.
   Por fin se encontró con un zorro viejo y astuto. - ¡Alto! ¡Alto hombrecito! - le dijo el zorro, sonriendo burlón y lamiéndose los labios.
   - Quiero hablar contigo -.
   Pero el hombrecito de jengibre, ni se detuvo a escucharlo. Simplemente, cantó:
   - ¡Corran, corran todo lo que puedan! ¡A mí no me podrán agarrar! ¡Soy el hombrecito de jengibre! -.
   El zorro viejo y astuto sabía correr muy rápido y corrió tras él. Lo siguió todo el camino a través del bosque.
   No había pasado mucho tiempo, cuando llegaron a un río. El hombrecito de jengibre no sabía que hacer.
   El zorro viejo y astuto, no estaba muy lejos.
   - Yo te ayudaré - le dijo, sonriendo para sí. 
   - Si saltas a mi cola te llevaré hasta el otro lado. Eatarás seguro y seco -.
 
   Entonces el hombrecito saltó a la cola del zorro y el zorro atravesó el río nadando.
   Muy pronto el zorro le dijo: 
   - Pesas demasiado para llevarte en mi cola, salta a mi lomo -

   El hombrecito de jengibre saltó al lomo del zorro.
   Muy pronto el zorro le dijo:
   - Pesas demasiado para llevarte en mi lomo ¿Por qué no saltas a mi hocico? -.
   El hombrecito de jengibre saltó al hocico del zorro.
   Finalmente llegaron al otro lado del río. El zorro hizo la cabeza hacia atrás y lanzó hacia arriba al hombrecito de jengibre.
   Luego el hombrecito de jengibre cayó y el viejo zorro hizo ¡Crac! con los dientes.
   Y así terminó el hombrecito de jengibre.
FIN 

"A pesar de que pueda tener un final un tanto violento, no olvidemos que el Hombre de Jengibre es comida y la comida suele acabar de esa forma, siendo consumida."

Soy la tía Carol y los dejo porque se me queman mis galletas...


No hay comentarios:

Publicar un comentario